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COMO SOCIALIZAR PERROS CACHORROS Y ADULTOS
Muchos de vosotros como dueños responsables y preocupados por la correcta educación de vuestro perro, nos preguntáis con frecuencia sobre como socializar a vuestro perro en las primeras etapas de cachorro.
La socialización es fundamental para conseguir tener un perro sano, feliz, equilibrado y bien adaptado al medio que le rodea. Para eso es muy importante que desde edades tempranas acostumbremos a nuestro cachorro a experimentar nuevos lugares, olores, sonidos, personas y objetos, entre otros. Cuando esto se hace de forma correcta, la socialización se convierte en una experiencia positiva para nuestro animal.
Cuál es el mejor momento para socializar perros cachorros
El mejor momento para conseguir buenos resultados es durante los primeros tres meses de la vida del cachorro, ya que este es el momento en que están más receptivos a la educación y a las nuevas experiencias.
Hay muchas razones por las que los cachorros pueden no tener una correcta educación o socialización durante esta etapa, como por ejemplo un cachorro enfermo que tiende a aislarse de otros perros. También podemos tener problemas de socialización con perros mayores, que hayan tenido malas experiencias o nunca hayan tenido la oportunidad de estar cerca de otros animales o personas que no sean su familia.
Socializar perros adultos y adoptados
Hoy en día es frecuente adoptar a un perrito o ser casa de acogida, y por desgracia es frecuente que nos encontremos con animales que no lo han pasado bien o no lo han tenido fácil en su vida y necesitan un poco más de cariño y paciencia por nuestra parte.
En cualquier caso no todo está perdido, ya que, independientemente de la situación (siempre hay excepciones y de ser así debemos ponernos en manos de un profesional etólogo veterinario) un perro puede aprender a ser sociable con otras personas y otros animales.
Consejos veterinarios para socializar perros
Siempre debemos ir poco a poco
Los perros que no están socializados pueden sentirse asustados cuando los sacamos de repente en público. Debemos hacerlo de forma paulatina y gradual al mundo exterior, comenzando por hacer paseos por nuestra propiedad o jardín con bozal y correa durante un tiempo antes de aventurarse fuera de la misma.
Si hay otros perros en el vecindario, nos permitirá observar cómo reacciona nuestra mascota. También se puede usar el bozal y la correa cuando invite a otras personas (y a sus mascotas) a casa para facilitar a nuestra mascota y lentamente la experiencia de estar con otros perros. Los expertos recomiendan poner el bozal a nuestro perro para que los primeros encuentros sean menos intimidantes para ambas partes.
Ejercicio físico y muchos paseos
Cuando nuestro cachorro o perro adulto se haya acostumbrado al jardín y esté listo para ir más lejos, comenzaremos a hacer excursiones por el parque o un área pública verde similar. Debemos hacer esto todos los días para ayudar a nuestra mascota a sentirse más cómoda con el mundo fuera del hogar. Dado que esta es la primera experiencia de su mascota, debemos esperar y estar preparados para algún percance por el camino.
Hay que ser conscientes de que la experiencia será abrumadora para nuestro perro, ya que hay mucho nuevo que ver, oír y oler en el camino, por lo que es comprensible que nuestro mejor amigo parezca asustado o haga varias paradas. Si normalmente sale a correr en los paseos y durante el día, dele más tiempo y espere que su viaje dure más de lo habitual.
Cada perro es un mundo y al igual que las personas, los perros tienen personalidades diferentes, por tanto reaccionarán a las situaciones de manera diferente. Debemos tener paciencia con el y observar cómo reacciona ante los nuevos estímulos, llevando el proceso de socialización acorde a la respuesta de nuestro animal.
Debemos tener en cuenta una cosa muy importante, todo lo que aprenda ahora y sobre todo para los cachorros esto es muy importante, va a condicionar el futuro. Es decir la forma en que responda a su comportamiento en público puede afectar de manera muy importante en las caminatas futuras.
Por ejemplo, si nuestro perro comienza a ladrar o a reaccionar negativamente, debemos intervenir tirando rápidamente de la correa o tocándole un costado. Con esto conseguimos dos cosas: distraerlos de los estímulos negativos mientras corregimos ese comportamiento. En situaciones en las que esto no funciona, simplemente nos alejaremos tranquilamente con nuestro perro.
Juegue con el perro y que sea uno más de la familia
Todos los elementos que forman parte del hogar sirven de estímulo y pueden ayudar a preparar a nuestro perro para encontrarse con el mundo exterior. Todo, desde los grandes electrodomésticos hasta los juguetes, también se puede utilizar en el proceso de educación. Incluso podemos hacer que otros miembros de nuestra familia participen para sacar a nuestro cachorro o perro mayor fuera de su zona de confort.
Es bueno dejar que nuestros hijos jueguen con el perro y con sus juguetes. Si se da el caso de que nuestro cachorro o perro adulto no está acostumbrado a que los juguetes hagan ruidos fuertes, debemos asegurarnos de que no se sienta asustado.
El juego es una fuente de estímulo y desarrollo muy importante para los perros, los perros de hecho necesitan jugar. Existen en el mercado un montón de juguetes homologados para perros (ej: marca Kong) y esto es bueno para que se acostumbren a diferentes texturas y sonidos. A cada animal le gusta uno diferente, por eso es bueno probar con varios para ver cuál es su preferido.
El juego es también una excelente manera de entrenar a los perros para que interactúen y jueguen con personas y otros animales. Debemos supervisar siempre estos momentos de juego que deben ser en horarios concretos y siempre de forma tranquila y no agresiva.
Conseguir que todo sea una experiencia positiva
Como en los ejercicios de entrenamiento podemos reforzar los comportamientos positivos de nuestra mascota, dando golosinas para ayudarle a comprender cómo comportarse e interactuar con otras personas o mascotas.
Es muy práctico tener siempre una bolsita con golosinas preparada cada vez que entrenemos a nuestra mascota, pero solo debemos entregárselas cuando el perro haya logrado una buena acción o se haya comportado bien. Solo se esta forma, nuestro amigo peludo asociará la golosina con la acción e, idealmente, seguirá haciéndolo.
Al igual que los juguetes, las golosinas están disponibles en cualquier tienda de animales o mascotas de tu ciudad. Cuando vayamos a adquirir un cachorro o perro adoptado es importante tener ya algunos juguetes y golosinas y de esta manera estaremos mejor preparados para enseñar a nuestra mascota a socializar.
En la clínica veterinaria María J. Cabeza en León, dentro de los Planes Preventivos de Salud, cuidamos mucho de un correcto desarrollo del cachorro en todas sus etapas. Como no puede ser de otra manera nosotros asesoramos a nuestros clientes de todo lo que tienen que hacer para conseguir una buena socialización en perros en ésta y otras etapas de su vida. Si tienes alguna duda no dejes de pedir cita con nuestros especialistas veterinarios.
Podemos decir y después de todo lo anteriormente expuesto que, el mejor momento para exponer a su mascota a otras personas y perros es cuando son muy pequeños. Pero esto no significa que un perro mayor no pueda aprender nuevos trucos o habilidades. Si sigues los consejos de nuestra clínica veterinaria en León, estará en unas mejores condiciones para conseguir que su mascota sea más sociable con otros perros y personas, con independencia de la edad o experiencias anteriores.
Dra. Maria J Cabeza
Directora de la Clinica Veterinaria en León Maria J. Cabeza.
Veterinaria Colegiada:1397